sábado, 1 de marzo de 2014

Halong Bay y Cat Bat … el paraíso vietnamita

Por Merche.


Llegar a Cat Bat atravesando la bahía de Halong es toda una experiencia. Esta bahía es un entorno increíblemente bello incapaz de ser captado por la cámara. Igualmente, la isla de Cat Ba es todo un paraíso, sobre todo en épocas en las que los turistas no aparecen en masa por allí. No tiene nada que ver con las atestadas islas tailandesas llenas de resort y de extranjeros. Esta islita vietnamita habitada por gente amable y con una exuberante selva que ocupa casi todo el terreno no deja indiferente al viajero que llega por primera vez. Las “dificultades” del trayecto para llegar y salir de la isla, bien merecidas están para poder disfrutar un poco de tiempo en este maravilloso lugar.



Desde Hanoi hay miles de agencias que te quieren solucionar la vida vendiéndote el circuito que a ellos más les interesa. Los hoteles de Hanoi suelen acosar a los huéspedes insistiéndoles en que contraten un determinado paquete. Así que si tú llegas con tu plan, resulta al principio un poco complicado llevarlo a cabo, incluso puedes llegar a pensar, como me pasó a mí, que mi plan era inviable. Por suerte, no fue así.
El plan inicial era salir de Hanoi, llegar a Halong o a Haiphong (se pronuncia jaifón) y de ahí llegar a Cat Ba, visitando previamente la bahía de Halong, y pasar una noche en la isla en lugar de en uno de los muchos barcos que se pasean por la bahía. La primera respuesta que tuve en la guesthouse donde me alojaba ante este planteamiento fue que era imposible, que Cat Ba estaba lejísimos y no podías ir para estar allí solo una noche. Plano en mano a mí no me parecía que la isla estuviera tan lejos y no me creía que ninguna agencia de la ciudad me pudiera ayudar a llevar a cabo mi plan. Casi por casualidad, me encontré preguntando en una agencia dirigida por David HUY quien no solo estaba dispuesto a ayudarme a realizar mi plan, sino que me dijo que era una opción que muchos turistas elegían. Así me di cuenta de que no podía fiarme mucho de las opiniones de los que querían venderme “sus paquetes turísticos” y era mucho más sensato confiar en mi intuición.

Aunque la idea inicial pasaba por salir de Haiphong en lugar de Halong, ya que en muchos blogs había leído que Halong parece un parque temático y el puerto es una locura de barcos donde te complican la vida para montar en uno de ellos, finalmente decidí aceptar la propuesta del señor HUY y hacer el viaje de Hanoi a Halong y de ahí a Cat Ba para pasar la noche y al día siguiente viajar a Haiphong para llegar de nuevo a Hanoi.

Así estaba planificada la ruta y así fue como se hizo, no sin vivir alguna que otra aventura.
Un minibús “de turistas” me recogió en la puerta de la guesthouse a las 8 de la mañana para llevarme a Halong, que está a unas 3 horas y media de Hanoi. En el minibús había unas veinte personas y casi la mitad éramos españoles o latinoamericanos. Nada más subir, el guía nos indicó que él era a quién nos tendríamos que dirigir ante cualquier pregunta o problema y que podíamos llamarlo Banana. En este grupo no íbamos todos a seguir la misma ruta, unos se quedaban en Cat Ba dos noches, otros una, otros no iban a Cat Ba sino que dormían en el barco, otros dormían en el barco y luego iban a Cat Ba… cada uno con su plan, que debíamos tener bien claro porque Banana luego no estaría en cada punto del trayecto para orientarnos, como más tarde se pudo ver. 

Después de la parada de rigor en el “restaurante de turistas” donde puedes ir al baño gratis y, si no quieres, no tienes que comprar nada, el minibús llegó al puerto de Halong.  Allí no había tanto lío como yo me imaginaba que iba a haber, supongo que esto era debido a que viajé en enero, temporada baja para esta zona y la mayoría de los barcos estaban amarrados sin pinta de tener previsto salir al mar.


En el puerto, Banana se encargó de buscar los tickets para que todos pudiésemos subir en el barco que nos llevaría a en un crucero por la bahía de Halong. Nada más subir nos sentaron en unas mesas de un pequeño saloncito donde nos ofrecieron el almuerzo, eran ya casi las 12, así que tocaba comer. No todos los que íbamos en el barco teníamos derecho a comida, se ve que algunos habían contratado la excursión sin este “lujo” y fueron enviados a la cubierta del barco mientras los demás disfrutábamos de una animada charla y unas raciones para compartir que no estuvieron mal.

Desde el saloncito, y a medida que el barco iba navegando, se empezaban a divisar los islotes. Pronto todos nos fuimos a cubierta para poder embelesarnos con la belleza del lugar, más impresionante a cada instante. Por suerte, la poca cantidad de barcos que había surcando la bahía de Halong ese día y el día tan soleado permitió que pudiese disfrutar de uno de los espectáculos más conmovedores de mi vida y es que este lugar es realmente bello, tan bello que no se puede describir.

Tras unas 4 horas de crucero, en el que puedes aprovechar durante casi una hora para hacer Kayak entre los islotes descubriendo cuevas, el barco llegó a Cat Ba y bajamos los que habíamos reservado hotel en la isla.

Ahí, el barco se volvió a marchar, Banana desapareció y ¡empezó la aventura! No conocía a nadie que hubiera estado en Cat Ba, así que no sabía muy bien qué me iba a encontrar.


Desde el puerto de Cat Ba hasta la zona de los hoteles hay una carretera que atraviesa la selva salpicada por algunas casitas de campo que se encuentran cercanas a la carretera. En este trayecto de 45 minutos se puede disfrutar de un hermosísimo paisaje y de la agradable sensación de recorrer uno de esos islotes que hacen de Halong Bay un lugar de insuperable belleza. Cat Ba no es ni más ni menos que otro islote igual que los demás, con la misma vegetación y la misma fauna, pero al ser un poco más grande, está habitado.
La zona hotelera no tiene nada que ver con Puerto Marina en Benalmádena, sino que se trata de un pequeño paseo a orillas del mar poco iluminado por la noche y con cierto ambiente fantasmagórico cuando llegas ya de noche, como me ocurrió a mí. El hotel donde me alojé, el Sunflower 2, (no confundir con Sunflower 1) se encuentra en una calle muy cercana al paseo marítimo y en él no había más que otra dos habitaciones ocupadas además de la mía. Esto, en un hotel de 11 plantas, no deja de sorprender. Para colmo, la cena no se sirve en este hotel sino en el restaurante Neptune, justo al lado, donde a pesar de haber dos plantas y varios salones, solo había dos mesas vestidas para servir la cena. La comida, bastante buena y muy abundante.

Lo más llamativo de la isla es la ausencia casi total de turistas, y eso quizás fue lo que me enamoró del lugar. Acabar en una isla abarrotada de gente no era lo que más me apetecía después de haber pasado dos días en la ruidosa Hanoi. Disfrutar del silencio y el olor a mar en Cat Ba era mucho más de lo que podía esperar.
La mañana se levantó soleada y como tenía tiempo hasta las 14:30 para visitar la isla, no perdí la oportunidad.


La zona poblada de Cat Ba se recorre fácilmente a pie y esto da opción a compartir un poco la vida con los habitantes del lugar. El mercado de Cat Ba ofrece delicias como rollitos recién fritos, pasteles tradicionales o ese aromático café vietnamita que apetece a cualquier hora. Entre las sorpresas del día, pude vivir en primera persona y a menos de 10 metros de distancia una palea cuchillo en mano entre dos vendedoras del mercado. La situación daba un poco de miedo, sobre todo por los gritos que pegaban y los cuchillos, pero viendo que sus vecinos no les hacían mucho caso tampoco iba yo a preocuparme. Eso me llamó especialmente la atención porque en Tailandia es difícil que pueda vivirse una escena así, sobre todo entre mujeres. En general, tanto para lo bueno como para lo malo, las silenciosas tailandesas no tienen el brío de las vietnamitas.

Siguiendo el paseo marítimo, uno puede descubrir unas preciosas y solitarias calitas de agua transparente y arena blanquísima. Un remanso de paz sin ningún turista en esta temporada baja. ¡Así da gusto! Las vistas de los islotes que salpican la bahía, que se pueden disfrutar desde ese paseo entre las rocas, son absolutamente impresionantes.


Cerca de las calitas hay hoteles que parecen de lujo y que imagino que deben estar a rebosar en otras épocas del año, por ello, recomiendo encarecidamente los meses de enero y febrero para dejarse caer por la isla. Es en estos meses cuando uno la puede disfrutar de verdad en todo su esplendor.

La vuelta a Hanoi fue toda una aventura. Después de almorzar de nuevo en el hotel Neptune, había que esperar a que viniera un autobús que acabaría su recorrido en el puerto. La hora se acercaba, los autobuses pasaban y las chicas del hotel decían que no era ese, que había que esperar…pero no, no había que esperar más, el autobús que debía recogerme ya había pasado, así que tras mucho insistir la chica del hotel volvió a llamar y comprobó que efectivamente mi autobús ya iba de camino al puerto y no pensaba volver. Así que hubo que recurrir a un moto- taxi para que subiera las empinadas cuestas de la isla a toda velocidad y diera caza al autobús. Todo fue bien, ¡menos mal! Fue tan bien, que aquello parecía una película.

El autobús llegó al puerto tras atravesar toda la isla y permitirnos a los viajeros disfrutar del paisaje sin despejar ni un segundo los ojos de la ventanilla. En el puerto me di cuenta de que todos llevaban un ticket para subir al speed-boat, pero yo no… Para mí sorpresa el del barco me dejó entrar sin ticket como sabiendo quien era. El trayecto de media hora en speed-boat hasta Haiphong fue más que agradable. Una vez en el puerto de llegada, yo seguía sin ninguna clase de ticket, pero un autobús nos llevó a todos los que íbamos en el barquito al centro de Haiphong.

Después de atravesar la impresionante zona industrial de Haiphong con una carretera llena de camiones que transportan contenedores para barcos, nos dejaron en un barecito donde una mujer me convenció tontamente para que le diera unas monedas tailandesas con la excusa de que las coleccionaba. Después me di cuenta de que intentaba cambiarlas a otros turistas por Dongs vietnamitas ¡qué lista la tía o qué tonta yo! Me creí en serio lo de que era coleccionista de monedas extranjeras. De repente aparece un hombre en una moto y me dice que lo siga hasta el autobús. Claro, no me iba a fiar de él, pero la mujer de las monedas me dijo que sí, que lo tenía que seguir. Así que no me quedó más remedio y me fui a la carrera a buscar el autobús detrás del hombre de la moto. Mi sorpresa fue mayúscula cuando el hombre de la moto para en mitad de la carretera y dice que ahí es donde tengo que esperar el autobús. Así fue. Pero el autobús no pensaba parar para que yo pudiera subirme, así que en marcha tuve que entrar en el bus con bastante esfuerzo y mi mochila colgada. El trayecto de dos horas y media hasta Hanoi fue bastante peligroso, desde mi punto de vista. El conductor del autobús que no paró para que yo me subiera, tampoco dejaba de pitar por todo el camino, pegando frenazos, aumentando la velocidad y adelantando temerariamente. No fue, para nada, un viaje relajado. Menos mal que en un autobús donde no hay turistas siempre “pasan cosas” y esto te ayuda a evadirte un poco del riesgo del viaje. Esta vez, un hombre muy amable me ofreció caña de azúcar para que la comiera o más bien la masticara para sacarle el jugo. Me tuvo que enseñar a hacerlo porque lo máximo que yo he hecho con la caña de azúcar es beber su zumo en los puestos de la calle y ni se me había ocurrido que aquello también se podía comer de esa manera.

Por fin el autobús llegó a Hanoi. Paró en la estación de autobuses que no está demasiado cerca del centro, por lo que había que coger un taxi. Para mi “suerte” el taxista me dijo “good taxi”… ya sabía yo que diciéndome eso algo raro había. Efectivamente, nada más montarme en el taxi advertí como el taxímetro llevaba una velocidad increíble, ¡ iba más rápido que las ruedas del coche ! Así que en cuanto reconocí el sitio por donde iba, le dije al taxista que parara porque si no igual me quedaba sin dinero para el resto del viaje.

Para volver desde Cat Ba a Hanoi hay muchísimas posibilidades. En Cat Ba hay muchas agencias que te organizan ese trayecto además de excursiones por Halong Bay. Cuando estás en Hanoi la gente no te da muchas explicaciones y piensas que entrar y salir de la isla va a ser casi una  misión imposible. Una vez que llegas allí  te das cuenta de lo fácil que es todo y la poca necesidad que tienes de tramitar nada con agencias. Por tu cuenta lo puedes hacer fácilmente, incluso la excursión a Halong Bay que desde Cat Ba sale más barata. Yo pagué 60$ (unos 50€) por los trayectos Hanoi - Cat Ba – Haiphong – Hanoi, incluyendo además el crucero por Halong Bay, la hora de kayak, la noche en el hotel de Cat Ba y todas las comidas en el restaurante Neptune. 

En un primer momento parecía difícil hacer este recorrido por las innumerables pegas que pusieron al principio los organizadores de excursiones en Hanoi. Después de haberlo hecho, me doy cuenta de que es mucho más fácil de lo que me hicieron ver, que Cat Ba bien se merece pasar unos días y que entrar y salir de la isla es tremendamente fácil, con posibilidad de elegir entre muchos horarios diferentes. No solo se puede llegar y salir de la isla por Halong sino también por Haiphong, incluso existe la posibilidad de viajar en tren desde Hanoi a Haiphong, con más tiempo, desde luego, esta es una buenísima opción.


Después de la incertidumbre y de las dificultades previas, Cat Ba es toda una recompensa para el viajero. Si tienes oportunidad ¡ no dejes de visitarla ¡ Te sorprenderá.

2 comentarios:

  1. Hola!

    Voy a la Bahía de Halong Bay en diciembre. Llego desde por un crucero directo a la Bahía. El hecho es que no se como llegar hasta Hanoi desde la Bahía de Halong Bay sin tener que contratar un tour.

    Agradecería tu opinión al respecto, porque veo que has tenido una experiencia bastante interesante al respecto.

    Muy buen Post!
    Gracias por anticipado!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola! Desde Halong Bay puedes coger un tren para ir a Hanoi, así que una vez que llegues al puerto, deberías ir a la estación de tren y allí comprar el billete para Hanoi. Puedes obtener más información en: http://www.halongbay.info/getting-there/hanoi-to-halong-bay.html

      Eliminar